miércoles, 3 de diciembre de 2014

Cazalla de la Sierra, Sevilla
Mañana volveré a visitar Cazalla de la Sierra, al Norte de Sevilla. A las 19h30 del jueves, 4 presentaremos en la casa de la cultura el libro "Tierra y Mar". Nos acompañarán, El Alcalde de Cazalla, Carmelo Conde; el Presidente de Ecovalia, amigo y compañero de fatigas, Francisco Casero; la bodeguera y amiga, Elena Vigueras de "Colonias de Galeón"; el Director Comercial de Corsevilla, Manuel Mazo, y el editor del libro, mi amigo Quique González Mestre, y espero que muchas y muchos serranos y cazalleros con quienes pasaremos un rato muy agradable, en torno al libro, a la cultura y al mundo rural. Desde aquí os invito fomalmente al encuentro de mañana.                                     Al frente de "Tierra y Mar" estuve muchas veces en este pueblo maravilloso, rodeado de dehesas en las que reinan las encinas, los quejigos y los alcornoques, diezmados por el temporal de agua y nieve sufrido en febrero de 2013, y sobre cuyos daños, los propietarios de fincas y los ganaderos siguen pidiendo ayudas, pues éstos tuvieron que poner dinero de su bolsillo para sacar todos los árboles y ramas destruídos, y restaurar la dehesa que estaba impracticable y con riesgo de que al llegar el verano, aquella masa forestal ardiera como la estopa. Hay decepción y cabreo entre los afectados ante la desafección de las administraciones tras aquel desastre, sin que recibieran la ayuda pedida y deseada. En su momento vinimos a grabar los daños originados por aquel desastre natural y ofrecimos nuestras cámaras para que los ganaderos y propietarios denunciarán la situación por la que estaban atravesando. Miles de cabezas de ganado bravo, porcino, ovino y caprino dependen de estas dehesas. Corsevilla con 400 socios ganaderos trata de sacar adelante a los ganaderos con la venta de sus productos de calidad, derivados del cerdo ibérico y de las ovejas y cabras serranas. Cazalla exportaba vinos a América a finales del siglo XV y a lo largo de los siglos XVI y XVII. Hoy hay varias bodegas que siguen aquella tradición centenaria, entre ellas Colonias de Galeón que elabora unos vinos ecológicos de extraordinaria calidad como "Ocnos" en blanco, y "Silente" en tinto, con variedades chardonnay, y Viognier (Blancos) y Cabernet france, tempranillo, Merlot, Syrah (tintos). Vris veces hemos ido a ofrecer reportajes de esta y otras Bodegas de la zona.
Queda una Cooperativa olivarera y de aceite como "La Purísima" que desde los años 60 vienen funcionando. Agrupa a 350 cooperativistas  con más de 300.000 olivos, con cuyas aceitunas se elaboran los aceites  "Cazalla oliva". Varias veces hemos ido en invierno a grabar los olivares cazalleros que se hallan en pendientes pronunciadas por lo que se necesitan animales de carga para entrar en algunos pagos a recoger la aceituna. Recuerdo un año en que fuimos a grabar la aceituna y la nieve nos sorprendió dejando unas imágenes bellísimas con los olivares blancos.
De las 15 fábricas de anises que había en el lugar, quedan sólo dos: "Clavel" de la familia Domecq y "Miura" de Bodegas Caballero. Hemos grabado varias veces el proceso de elaboración de estos anisados que llevan el nombre de Cazalla por toda España. Cazalla y sus alrededores gozan de una maravilla natural, como el Parque Natural de la Sierra Norte, en el que podemos ver y oír a las aguas del río Huéznar en su nacimiento y en su fluir armonioso hasta despeñarse formando unas cascadas impresionantes que se desbocan hacia el interior de la sierra. La Escuela de Educación Ambiental, el Remolino también ha sido objeto de algún reportaje por parte e Tierra y Mar, como el Huéznar, el Cerro del Hierro, los paisajes de Sierra Morena y sus habitantes, y entre ellos, los propietarios de algunos establecimientos hosteleros rurales, donde uno se retira del mundanal ruido, como La Cartuja de Cazalla que se yergue a unos kilómetros de Cazalla desde el siglo XV, y regentada por Mari Carmen Ladrón de Guevara;  o "El remolino", o "Riscos Altos", regentado por Carmen Bendala o las Navezuelas, con Mariló y Lucas llevando el negocio. En fin, que será un placer reencontrarme con las gentes de la sierra, y de Cazalla en concreto y volver a disfrutar del paisaje y del caserío de Cazalla y de sus gentes, esas personas "invisibles" que hacen posible, que el mundo rural siga vivo. Ezequiel Martínez.  Fotos de Cazalla y de la dehesa.








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