Cataluña
Sobre el diálogo de sordos entre la Generalitat y el Gobierno de España
"Tensa un arco hasta el límite, y te arrepentirás de haberlo hecho" (Tao Te King)
Opinión: Estoy casado con una mujer de Barcelona. La familia de mi esposa reside en Cataluña.
Nací en Madrid y vivo desde hace 34 años en Andalucía, concretamente en Sevilla. Me siento andaluz de adopción, madrileño de nacimiento y porqué viví la mitad de mi vida en "El rompeolas de todas las Españas", y llevo dentro de mí una parte de influencia catalana en cuanto a que viajo y visitó esa Comunidad, ese país, dos o tres veces al año desde hace muchos años, y admiro a sus gentes, a su cultura; su historia, su gastronomía, su geografía y sus bellos paisajes los he incorporado a mi acerbo cultural y existencial. Y tengo muy buenos amigos en Cataluña, en la Cerdanya, en Cadaqués, en Sitges, en Hospitalet de Llobregat, en Orrius y en Barcelona. Me considero internacionalista, no nacionalista, ni de aquí, ni de allá, porque creo que los nacionalismos limitan, reducen, acortan la visión global de conjunto. La defensa de los nacionalismos provoca enfrentamientos, odios, guerras y muerte. No hay más que echar un vistazo a la historia de Europa. O a la más triste y reciente historia de España, las más triste de todas las historias, que diría el poeta. Y ver los conflictos actuales a causa de los ismos.
Uno ve y escucha por los medios, y conoce por los amigos de Cataluña, la multitudinaria manifestación que hubo en la reciente Diada y el dato aproximado de cerca de 1.800.000 personas que pudieron participar en la famosa UVE, y da que pensar. ¿Porqué estaban allí todas esas personas? Por el derecho a decidir....qué? Por querer votar el 9 N en el referéndum anunciado por la Generalitat, o mejor por la coalición CiU y ER, o mejor aún, por el Presidente de la Generalitat,  Artur Mas; o esa multitud se manifestaba toda ella ¿en favor de la soberanía y de la independencia? No lo podemos saber. Cómo tampoco podemos saber sobre la opinión de los más de cinco millones de catalanes que no participaron en la manifestación de Barcelona. Sí sabemos de otra manifestación de unos cuantos miles de personas que se manifestaron en Tarragona en defensa de seguir siendo catalanes y españoles, y en contra de los deseos independentistas. También sabemos por las anteriores convocatorias electorales, lo que el pueblo catalán en su conjunto ha votado, aunque votar a determinados partidos no quiere decir que se vote a favor o en contra de la independencia, pero sí señalan los resultados electorales, las tendencias según la defensa que cada partido hace de una opción o de otra. ¿Escenario de aquí al día 9 N? 1/ La Generalitat convocará el plebiscito. 2/ El Gobierno de España lo impugnará por inconstitucional. 3/ El Tribunal Constitucional actuará de urgencia y anulará la convocatoria de la Generalitat por inconstitucional.
Cabe pensar que las urnas no se expondrán en los colegios electorales catalanes. Podría ser que aparecieran urnas en determinados lugares. ¿Que harían los mossos d' esquadra? ¿Qué harían las fuerzas de seguridad del Estado? ¿Qué harían los políticos? ¿Qué harían los ciudadanos de Cataluña?
La respuesta está en el viento...
¿Qué puede ocurrir después del 9N? Pues que habrá que esperar a unas próximas elecciones, o quizá antes que un partido con suficiente respaldo, como el PSOE y las demás fuerzas que  secundaran la propuesta, presenten una iniciativa en el Parlamento para modificar la Constitución, pero como el PP tiene mayoría aplicará la ley del rodillo para justificar la máxima lampedusiana. Sin embargo, si en unas próximas elecciones el partido o los partidos que salgan elegidos mayoritariamente son partidarios de reformar la Constitución, podría darse con esa tercera vía que daría esperanza y sentido a las reivindicaciones de una parte importante de la población catalana.
Como ciudadano del mundo, para mí sería lastimoso y doloroso que Cataluña dejase de formar parte de esta identidad geográfica, histórica, cultural, fraternal (salvo los roces futboleros) que he conocido en mi vida con el nombre de España, pues esa palabra engloba un todo compuesto por múltiples sensibilidades, nacionalidades y culturas, como la vasca, la gallega, la aragonesa.la andaluza, la castellana y como no, la catalana; y yo me siento integrado en todas y cada una de ellas, y supongo y quiero pensar, que la mayoría de los demás españoles que viven en otras comunidades o países, sienten también como algo suyo, lo balear, lo extremeño, lo astur, lo navarro, lo murciano, lo canario, lo riojano, lo leonés, lo ampurdanés, lo salmantino, lo ceutí y lo melillense, lo valencíá, lo tarragonés, lo cordobés, lo granadino, lo zamorano, lo oscense; y lo identitario de cada pueblo y cultura, cuyo todo armonioso, bellísimo y crisol enriquecedor, reconocemos como España. Mi ferviente deseo es que en un futuro se reconozca un poco más, la singularidad de Cataluña y su aportación financiera al resto del Estado, y que los catalanes se sientan orgullosos de serlo y también de ser parte importante de España, y que sigamos hermanados en esta fraternidad que creo desean la mayoría de los catalanes y de los demás españoles.
Y concluyo con un ramillete de poetas:
Joan Vinyoli,  Barcelona, 1914: De "las aguas detenidas": "Anys a venir direm: d'aquest indret fluïen les aigües aturades" (Años después diremos: de este lugar fluían las aguas detenidas).

Miquel Martí i Pol: "Una mica  més d' esperança/ i el pas de l'una a l'altra quietud/ será més fácil y més cla" (Un poco más de esperanza/ y el paso de la una a la otra quietud/ será más fácil y más clara)

Gabriel Celaya: "Cantos iberos" De "España en pie": "Lo siento con todo el cuerpo,/ con toda el alma, yo entero,/ por español, junto tripas, brío, idea, carne y hueso./ ¡A ver si nos entendemos!

Ezequiel Martínez