DULCE ENERO DE 2017.-                                                                                                               Para empezar bien el año, desearos que los Reyes sean magnánimos y generosos con vosotros (con vosotras). Ahora la RAE nos dice que dejemos de poner el femenino cuando el  adjetivo es claro y se refiere a ambos géneros, a ambos sexos. Y tras desearos salud, y algún regalo, señal de que hay personas que piensan en vosotras y en vosotros, os invito a que os acerquéis al mundo de las mermeladas. Días atrás, antes de que finalizará el año 2016, elaboré mermelada de naranja amarga y carne de membrillo, para endulzar este año nuevo. Y ahí dejé los tarros llenos de rica mermelada y de membrillo. Si queréis mi receta (podéis encontrar muchas en el universo Google) aconsejo: Por cada 2 kgs de naranja amarga, sólo la mitad o menos de las cortezas usadas ralladitas, añadir cerca de 2kgs de azúcar, es decr, casi la misma cantidad, hay quien le pone menos azúcar, entre un kilo y kilo y medio, pero si te acercas en azúcar al peso de la fruta utilizado te quedará mejor, canela en rama unas varitas en cocción, varias pepitas de cardamomo, dos limones exprimidos sobre las naranjas y media copita de vino PX de Montilla-Moriles, o de Jerez, o en su defecto vino de pasas de Málaga.
Tras limpiar bien las naranjas de los huesos, y trocearlas, pones a cocer las naranjas y las cortezas ralladitas, cuando lleva un rato le añades el azúcar, se remueve hasta que la blancura se disuelve y se añaden las varitas de canela y el cardamomo controlado en los accesorios metálicos para el té, para que no se te pierdan entre la masa de las naranjas y el azúcar. Le añades la media copita de vino dulce. Y a esperar y a remover de vez en cuando para que el azúcar no se pegue en el fondo de la olla. A la media hora más o menos, cuando veas que el nivel de cocción es bueno, se retira la olla del fuego. Con cuidado de no quemarte, sacas la canela y el cardamomo, y coges una minipimer y vas demenuzando los trozos más gruesos de naranja, diluyendo la masa para que no quede tan compacta, al punto que quieras. Lo vuelves a poner en el fuego, y le das unos hervores durante unos 15-20´´. Se apaga el fuego. Y se deja reposar hasta que se vaya enfriando. Con una cuchara grande se van rellenando los frascos y tarros preparados previamente. Se cierran y se meten los frascos en otra olla al baño maría durante unos 20´. Se sacan con cuidado los frascos de la olla y se ponen a reposar durante la noche. Y a la mañana siguiente tienes lista la mermelada y el membrillo.
Para el membrillo prácticamente lo mismo, cuidando de limpiar los frutos y pelarlos hien, y sacarles las pepitas que hay en el corazón del fruto. Y prácticamente las msmas cantidades,  sin olovidar los dos imones a exprimir. Y listo, a disfrutar del invierno  y de los desayunos y meriendas con las mermeladas y el membrillo. El membrillo con queso curado de postre, magnífico.