Hemos tenido el placer de poder conversar en una entrevista durante más de una hora, en el Ateneo de Mairena del Aljarafe con Cristina Hoyos, una de las más grandes bailaoras de flamenco de las última décadas. La acompañaban su esposo, el bailarín Juan Antonio Jiménez quien se enfrenta a Gades en Bodas de sangre, y quien ha acompañado a Cristina en muchas de las representaciones de su Compañía. Estaban también el guitarrista Ricardo Miño y la bailaora Pepa Montes, y otros amigos de la pareja de bailaores. Y los socios y socias del Ateneo, más mujeres que hombres, que acudimos a admirar y a homenajear a esta gran dama del baile flamenco andaluz, español y universal. En 1965 Antonio Gades la vio actuar en el tablao "El Duende" de Madrid. Y en 1969 la llamó y le ofreció ser la primera bailarina de su Compañía. Esta joven nacida en Sevilla, de familia humilde no tenía antecedentes familiares en el baile, ni en el flamenco. Oyendo en la radio a Antonio Machín, a Albéniz, a Falla, y oyendo cantar flamenco se aficionó al baile. Intervino en "Galas juveniles" en RNE. Fue a la escuela de Adelita Domingo y allí aprendió a bailar. Más tarde aprendería con Enrique el Cojo. En 1965 viajó a Nueva York, contratada por Manuela Vargas para actuar en el Pabellón español de la Feria Mundial. federico garcía Lorca, Neruda, Pedro Salinas, Antonio Machado y Miguel Hernández sus poetas de cabecera, pero sobre todo Lorca. Con Saura y Gades participó en las películas: Bodas de sangre (1978); Carmen (1983) y El Amor Brujo (1985). Vicente Escribá la dirigió en "Montoyas y Tarantos" (1989) y en Juncal con Jaime de Armiñán; en "Antártida" con Manuel Huerga y en "Despacito y a compás" sobre su vida. Anne Hidalgo, hoy Alcaldesa de París la distinguió con la medalla de la Villa. Cristina Hoyos es Premio Nacional de Danza y Medalla de Oro de Andalucía (1991); Medalla de Oro de las Bellas Artes en 1993; en 1997 es nombrada Caballero de la Orden de las Artes y las Letras de Francia; en 2000 Premio Max a la mejor intérprete femenina de Danza; 2002: Premio Bienal de flamenco al mejor cuerpo de baile; 2004: Premio Max a la mejor intérprete femenina de Danza; en 2011: Premio Embajadora del turismo y la cultura de Pekín; enero 2017: Cristina Hoyos y Salvador Távora son nombrados miembros de honor de la Academia de Artes Escénicas de España. Cristina Hoyos ha viajado varias veces a China, y sobre a todo Japón, donde veneran al flamenco y se cuentan por centenares las escuelas de flamenco en el país nipón.
Cristina Hoyos actuó en 1969 en el Teatro Odeón de París con Antonio Gades; en 1990, en el Teatro de la Opera de París, siendo la primera compañía de danza española que actuaba en el templo de la música parisino. En 1992, actúó en la Expo Universal de Sevilla y en la ceremonia de inauguración y clausura de los JJOO de Barcelona 92. En 2003, en los jardínes del Generalife con "Yerma" de Federico García Lorca, bajo la dirección de José Carlos Plaza; en 2005, en el Gran Teatro de Córdoba con"Viaje al Sur" dirigida por Ramón Oller; en 2006, en el Generalife en la Alhambra con "romancero Gitano", dirigida por José Carlos Plaza. En el transcurso de la entrevista le pedí a Cristina por favor, que si se animaba la invitaba a que mientras le leía un poema del Romancero Gitano "Romance de la luna, luna", fuera acompañando la recitación con movimientos de sus manos y brazos en el aire, y si sus pies se lo pedían, también. "mis pies no están muy bien", nos dijo. Empecé a recitar "Romance de la luna, luna" y Cristina Hoyos se puso en pie y empezó a mover con elegancia sus manos, sus muñecas y sus brazos, y al cabo de algo más de un minuto cuando concluyó el poema que leí fragmentado y más breve, el público se puso en pie aplaudiéndola. Fueron unos momentos mágicos que no olvidaremos quienes lo presenciamos. Luego hablamos de su enfermedad, del cáncer de mama que sufrió y habló con una naturalidad, con una sencillez, y de las campañas que realiza para concienciar a las personas de la importancia de la prevención y de la fuerza interior que hay que tener para luchar contra la enfermedad. Sobre el flamenco y el baile, nos dijo que "hoy hay mucha fusión y mucha confusión". Y qué sobre la técnica ella entiende que junto a ella es muy importante la pasión, la entrega, el instinto de superación para poder hacerlo bien. ¡Cuando yo estoy en un escenario me entrego y noto una fuerza interior en el pecho, en mi cuerpo que sube y quiere salir, y el pelo se me electriza, se me ponde de punta, y entonces sé que estoy bailando emocionadamente, con pasión, con arte! ¡Qué noche la de aquel día! Gracias Cristina Hoyos y gracias Juan Antonio Jiménez.
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